cotidianidad

Sobre la corrupción 

Existen  muchas situaciones en las que la mayoría de las personas está de acuerdo. Una de ellas es que la corrupción es algo malo, no importa en qué ámbito se lleve a cabo.

Sin embargo, en muy pocas ocasiones estamos dispuestos a reconocer nuestra participación en ella. Si… cuando nos vemos afectados por ella nos molestamos, pero si nos llegara a beneficiar guardamos un ominoso silencio y si alguien nos inquiere nos molestamos y damos un sinnúmero de excusas o la clásica respuesta de “todos lo hacen”.

Por supuesto, tenemos el derecho de exigir una sociedad justa, lo que implica que tenemos la obligación de ser parte de ella, si,  el precio de la honestidad es la honestidad misma. Debemos ser dignos de ella.

No se trata de realizar grandes acciones con solo hacer lo que nos toca, educar a nuestros hijos para que sean honestos, ¿Cómo?, poniendo el ejemplo,… estacionarse en los lugares permitidos, respetar los cubos de estacionamiento para personas de capacidades diferentes, respetar las filas que hacemos en el súper, respetando las señales de tránsito, no pasarse los altos, hacer alto en los cruces peatonales, realizar nuestro trabajo con dignidad con ética y profesionalismo, en fin, hay tantas cosas en la vida cotidiana que haría de esta sociedad,  sin mayores esfuerzos y gastos, una civilización  justa y honesta.

Seamos pues merecedores de la honestidad y la justicia que reclamamos. heredemos a las generaciones venideras una cultura de respeto. Seamos, en pocas palabras, personas íntegras y todo será mejor.